Muchos de nosotros no sabemos muchas veces qué comer si nos encontramos fuera de casa.
Es natural que cualquier persona en estos tiempos, pues por lo menos una de sus comidas no sea en casa, sea que estemos en el trabajo, en la calle, en alguna actividad específica donde no podamos tener la comodidad de nuestros alimentos en casa. Para esto, también hay algunas recomendaciones para solucionar. En primera, me gustaría que supiéramos cuál es la oferta alimentaria. Nosotros encontramos comida en restaurantes, encontramos en centros comerciales, encontramos, por qué no, comida en puestos callejeros, comida de la calle, y muchas veces nosotros cargamos la comida de casa para comerla en nuestra área de trabajo o donde estemos. Voy a dar algunas recomendaciones importantes para poder tener una dimensión clara de cómo comer los alimentos sanamente fuera de casa. Por ejemplo, si uno va a un restaurante, es importante que si estamos bajo un tratamiento para revertir, o bien, para controlar la obesidad, pedir platillos que conozcamos previamente en su tamaño, o bien, pedir platillos pequeños. En los restaurantes, normalmente vamos a encontrar medias porciones; hay restaurantes que lo tienen, hay restaurantes que no. Otra opción será compartir el alimento si comemos acompañados. Y una tercera opción importante será seleccionar lo que nos vamos a comer y lo demás pedirlo para llevar, para una siguiente toma de alimento. Si nosotros comemos en lugares de comida rápida, que en muchos lugares llaman fondas, que la comida es una oferta alimentaria muy fija, con menús previamente planeados y continuos, y rápidos, que es lo que acostumbra mucha gente que trabaja en la calle, por ejemplo burócratas, será escoger el alimento en porciones pequeñas, es decir, normalmente, en estas ofertas alimentarias, se da una sopa, arroz y algún platillo. Podrían omitir alguno de los dos, es decir, la pura sopa o el arroz para evitar la sobrecarga del alimento y comer la porción del guisado. Normalmente, estos lugares, por cuestión de economía, pueden tener la ventaja de que sirven porciones pequeñas, y esto, pues obviamente aventajará en nuestro proceso de cambio. Si usted come en lugares de la calle donde los tamaños no son como en los anteriores ejemplos que puse de oferta alimentaria, usted puede seleccionar, dependiendo del alimento que escoja, la cantidad. Aquí es muy importante utilizar las herramientas que hemos venido trabajando, de autoeficacia, de autoayuda, para saber con qué cantidad estamos satisfechos, y entender a nuestro organismo cuál es verdaderamente la cantidad de alimento que necesitamos. No hacer esto por imitación, y conformarse a lo mejor con una o
dos porciones del alimento será más que suficiente. En realidad, la autoeficacia que podamos tener en el proceso nos ayuda mucho en controlar nuestra manera de comer. Es importante saber que es responsabilidad nuestra la cantidad de alimento que nos llevamos a la boca y, sobre todo, es importante saber las dimensiones que puede alcanzar el que uno no cuantifique adecuadamente los alimentos. Contamos en este curso con herramientas mediante las cuales ustedes pueden cuantificar perfectamente la cantidad de alimentos en cuanto a calorías, a nutrimentos y al aporte de los mismos. De esta manera, cerramos un círculo mediante el cual podemos conocer exactamente la cantidad de lo que comemos sin tener la culpa que a veces conlleva el comer cantidades que no sabemos cuantificar.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario